3 maneras de mantener tus joyas como nuevas




¿Cuál es tu joya más preciada? Puede ser un collar, unos pendientes, tal vez una pulsera, o un prendedor. Cada uno de estos objetos tiene un valor y, como ya se ha mencionado, el tipo de valor que se le da a las joyas abarca un gran espectro. El valor emocional o sentimental de dichas joyas es, posiblemente, el que más presente está en las personas. El valor cultural, si bien no es expresado de manera explícita, puede verse reflejado en las distintas tendencias según la región del mundo o el grupo que las utiliza.


El valor religioso también está presente y ha estado vigente desde el inicio de la civilización. Y no podemos dejar de mencionar el valor monetario de las joyas, es decir, su precio, su peso y los materiales que fueron utilizados para su producción. Es cierto que este último valor que tiene una joya no es estipulado por su poseedor, como es en el caso dell valor sentimental. Será menester que los tasadores de joyas pleasant hill o los vendedores y compradores de joyas pleasant hill le asignen un valor en base a los aspectos mencionados.


Si hasta este punto te has convencido de que, efectivamente, tus joyas tienen uno o más valores en sí mismas, queda una pregunta importante para responder, ¿cómo las mantienes? O, antes de eso tal vez debas responder si sabes cuáles son los cuidados que tus joyas necesitan. Está bien, no todas las joyas que heredamos o que nos obsequian vienen con un manual de instrucciones y cuidados, sin embargo, con el objetivo de mantener estas fuentes inagotables de valor en buen estado, te doy algunos tips.


Las cosas en orden

Estás próxima o próximo a salir de casa, ya elegiste la vestimenta y las joyas que usarás, das una última mirada de tu reflejo en el espejo y, por poco lo olvidas, el perfume. Te rocías con esa fragancia que no te podía faltar y sales. Esta historia tal vez resuena contigo, seguro que resuena con la mayoría, sin embargo contiene en ella un error fatal ¿Te puedes dar cuenta de qué error hablo?


Los perfumes y productos de uso diario como lociones, colonias y otros, son incompatibles con las joyas, especialmente con éstas hechas de oro, plata, acero y las que contienen piedras preciosas o semipreciosas. A simple vista, no parece haber ningún daño, sin embargo el daño podrá ser observado a mediano o largo plazo ya que estos metales comenzarán a ponerse opacos, y las piedras preciosas perderán su transparencia.


Los químicos propios de los perfumes son extremadamente dañinos para las joyas, por ejemplo, el mercurio es reconocido como el peor enemigo del oro. Entonces, el orden de uso debería empezar por la aplicación de perfume o colonia, dejar secar y posteriormente agregar ese collar, esos pendientes o esa pulsera que tan bien complementan tu outfit.


Diversión y joyas no siempre van de la mano

Más de una vez hemos escuchado sobre la historia de la pareja de recién casados que, en su luna de miel en un destino exotico de playas con agua transparente y cocteles en cocos, pierden sus alianzas, o anillos de matrimonio. Es realmente frustrante la idea de perder una joya con tanto valor sentimental y simbólico, pero, permíteme decirte que el extravío no es el único riesgo que existe para esos objetos tan preciados.


Lamentablemente, tanto el agua de mar, como el sudor y los cambios bruscos de temperatura pueden dañar los metales y piedras preciosas de nuestras joyas. La sal del agua de mar y el cloro de la piscina afectan directamente al color de éstas, mientras que el ácido característico del sudor de la piel genera opacidad en el oro. Además que, cualquier actividad física o deporte realizado con joyas puestas, puede generar golpes que con el tiempo debiliten los engastes provocando así la caída y pérdida de las piedras preciosas.


Si evitamos estas reacciones químicas no deseadas, en efecto, estamos manteniendo de nuestras joyas, pero, ¿hay algo más que se pueda hacer? ¿Cuál sería un rol activo más que pasivo respecto al cuidado de nuestros objetos de valor más preciados? Y si, existen unas cuantas actividades que se deben hacer esporádicamente para prolongar la vida de las joyas y, por ende, su valor.


Limpia y guarda

Estas son dos palabras claves que se deben tener en cuenta para el correcto mantenimiento de tus joyas. En primer lugar, la limpieza de las joyas de oro y de plata se puede hacer con agua tibia y jabón para limpiar la vajilla. Ya sea que las dejes remojando por unos minutos o decidas frotarlas suavemente con un cepillo de cerdas finas, este procedimiento debe ser realizado cada 6 meses aproximadamente. No obstante, algunos expertos recomiendan limpiar las joyas con un paño de algodón cada vez que las uses para así eliminar cualquier rastro de polvo, grasa o, inclusive, huellas dactilares.


En cuanto al almacenamiento de nuestras prendas de valor, es importante recordar que muchas de ellas deben ir separadas en sus respectivas bolsitas de terciopelo o en papel seda. En el caso del oro recuerda que éste se raya con facilidad, por lo que cada pieza debe ir separada de la otra. Las joyas hechas de plata son de fácil oxidación y, ya que las grasas naturales de la piel ayudan a prevenir este fenómeno, pues no te queda más que lucirlas frecuentemente.


Mantener nuestras joyas en buen more info estado no sólo alarga su vida de uso, sino que mantiene su valor, tanto el sentimental como el valor que las joyas tienen en el mercado. Ya sea que quiera vender mi plata pleasant hill o vender mis joyas de plata pleasant hill en alguna tienda, o recibir efectivo por oro pleasant hill en casas de empeño, o simplemente quiera conservarlas para después heredarlas a otras generaciones de mi familia, las joyas que poseo serán el símbolo de una historia, de un momento y del cuidado que les proporcione.


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